jueves, 19 de marzo de 2009

10.- Todos se asustaron.


Hasta los pájaros me persiguieron- Dijo llorando el pequeño duende Tuyo.
-¿Porqué?- Preguntó Osi.
-No sé. ¿Por miedo?
-Sí amigo. El miedo puede hacer cosas así.
Osi agregó.
-Perdónalos.
Y el duende Tuyo dijo.
-Ya los perdoné.

2 comentarios:

Isabel Barceló Chico dijo...

Tus ilustraciones son magníficas. Veo que el duende Tuyo se encarga de recoger los dientes que caen a los niños y les entrega monedas a cambio. Aquí en España esa labor la hace el Ratoncito Pérez, una figura entrañable para nosotros. Besos, querido amigo, y gracias por tu compañía.

Joseín Moros dijo...

Gracias Isabel.